By Victor Villa
En una confrontación intensa y llena de tensión, Baron Corbin y Carmelo Hayes se encontraron cara a cara sobre el ring en un careo previo a su esperado enfrentamiento por el Campeonato de NXT. El ambiente estaba cargado de rivalidad y ambición mientras ambos luchadores intercambiaban palabras desafiantes.
Baron Corbin, en su característico estilo provocador, interrumpió la entrada de Carmelo Hayes junto a su acompañante Trick Williams. Corbin exigió que se dejara de lado el tema de entrada del campeón y dejó claro que no estaba interesado en presenciar las poses de Melo. Hayes respondió desafiante, proponiendo comenzar de inmediato el careo.
Corbin no perdió tiempo en desacreditar las poses de Carmelo y aseguró que estas no le ayudarían a conservar el título. El experimentado luchador dejó claro que poseer el Campeonato no significaba que lo hubiera ganado realmente. Además, Baron aseguró a Hayes que nada de lo que le dijera ni lo que ocurriera la próxima semana sería nuevo para él, insinuando su confianza en sus habilidades.
El público estalló coreando el nombre de Melo, respaldando al campeón. Sin embargo, Corbin se mostró indiferente ante las opiniones del público, los espectadores y el propio Hayes. Carmelo acusó a Corbin de intentar vencerlo solo para recuperar relevancia, pero afirmó que no lo lograría, ya que esta era su casa y defendería su territorio a toda costa.
Baron respondió señalando que podrían comparar sus cuentas bancarias o sus momentos en WrestleMania, y él siempre saldría ganando. Sin embargo, Carmelo no se quedó atrás y recordó a Corbin que, a sus 26 años, ya había conquistado el Campeonato de NXT, mientras que en esa misma edad, Baron fue rechazado por los Arizona Cardinals, un golpe directo a la carrera deportiva de su oponente.
Hayes dejó claro que ahora esta era su casa, y que era diferente de lo que Corbin recordaba. Melo afirmó haber ampliado y renovado este lugar, añadiendo nuevos pisos y un nuevo techo, en referencia a las victorias y logros que ha obtenido. De manera contundente, Carmelo proclamó que él era HIM (ÉL), destacando su poder y dominio en el ring.
Baron, en un intento de desacreditar a su rival, señaló que si tuviera que salir cada semana para recordarle a todos, incluyéndose a sí mismo, que era ÉL, entonces ya no lo sería. Además, se burló de la presencia insignificante de Hayes durante su visita a SmackDown, insinuando su falta de relevancia en comparación con él.
Corbin dejó en claro que este era el momento en que el segmento debería terminar con él destrozando al campeón, pero sorprendentemente decidió no hacerlo. En cambio, anunció que esperaría hasta la próxima semana para derrotar a Carmelo y ganar el Campeonato de NXT. Con una actitud de
